Ketamina en el tratamiento de la depresión grave.

Fecha de publicación: Mar 20, 2011 3:29:55 PM

Estudios reciente en psiquiatría y de los medicamentos, muestran que el uso de ketamina mejora la depresión grave con importante riesgo suicida, y esto merece mayor atención. Las actuales opciones de tratamiento para los trastornos afectivos graves se ven limitadas por el transcurso lento en el tratamiento para lograr el cambio de los pensamientos suicidas. Si no se tiene éxito con la medicación, en 12 semanas se debe prescribir un antidepresivo diferente.

La ketamina es un anestésico general de acción rápida con anestesia profunda y conservación del reflejo faríngeo-laríngeo y estímulo cardiorrespiratorio. Produce una anestesia disociada interrumpiendo selectivamente las vías de asociación cerebral antes de provocar bloqueo sensorial. Deprime selectivamente el sistema talamocortical antes de bloquear los centros cerebrales y el sistema activador reticular y límbico. La ketamina forma parte de un grupo heterogéneo de sustancias químicas “club drugs” como sustancias que se consumen con ánimo recreativo buscando la amplificación de sensaciones, mediante la combinación de música electrónica, baile maratoniano y consumo de sustancias, con un aumento importante de su consumo en los últimos años (1).

El primer estudio controlado con placebo se realizó en el año 2000, fue un estudio doble ciego para evaluar los efectos del tratamiento de una dosis única de un antagonista de los receptores N-metil-D-aspartato (NMDA) en pacientes con depresión. La N-metil-D-aspartato (NMDA) ketamina antagonista ha mostrado de manera consistente los efectos antidepresivos en unas pocas horas de su administración (2). Se han continuado algunos trabajos y se realizó en el 2009 una revisión de la evidencia de que el alfa-amino-3-hidroxi-5-metil-4-isoxazolpropiónico (AMPA) para el rendimiento NMDA puede representar un mecanismo de convergencia de las acciones rápidas antidepresivo de la ketamina (3).

También en la actualidad hay pruebas abrumadoras en relación al estrés y la depresión, que demuestran que los niveles séricos del factor neurotrófico de neurotrofina cerebral (BDNF), se reduce en las personas que sufren de trastorno depresivo mayor. Los hallazgos proporcionan una fuerte evidencia para sugerir que los niveles de BDNF en suero son anormalmente bajos en los pacientes con trastorno depresivo mayor, y que los niveles de BDNF se elevan después del tratamiento con antidepresivos (4). Sin embargo y a pesar de acaparar la mayoría de estudios sobre la depresión, poco se ha relacionado el BDNF con la acción de la ketamina.

Gráfica. Cambios séricos del BDNF con el tratamiento AD

 

Resultados preliminares apoyan la premisa de que la ketamina con vigilancia y seguridad adecuada, tiene un rápido efecto beneficioso sobre la cognición suicidas. La evidencia indica que una sola dosis de ketamina subanestésicas por vía intravenosa (0.5 mg / kg diluida en solución salina), agente de glutamato-modulación, muestra en escalas de medición que se reducen los síntomas agudos depresivos en el 70% de los pacientes con Trastorno Depresivo Mayor 24 horas después de la infusión, y con reducción de la tendencia suicida (5).

Gráfica. Individual patient scores on the Montgomery-Asberg Rating Scale—Suicide item at baseline (Day 1; 150 minutes prior to infusion), 24-hours following a single subanesthetic infusion of ketamine (Day 2), and 4-hours following the final repeated infusion (Day 12 of study; Panel 2 only).

Es así como se prevee que la ketamina ayude a reducir el deseo de escapar de un estado emocional insoportable y disminuya a la vez, los pensamientos suicidas que le acompañan. Lo que le haría un tratamiento atractivo para quien padece este tipo de trastorno psiquiátrico grave, aunque hacen falta más estudios controlados.

En entrevista para la revista Investigación y Ciencia del 20/06/2011, de estudios realizados en ratones, la profesora en psiquiatría Lisa Monteggia del Centro Médico del Suroeste de la Universidad de Texas revela que la ketamina produce un incremento muy marcado que inmediatamente alivia la depresión. La ketamina y otros anestésicos similares tienen un efecto antidepresivo de acción rápida gracias a la síntesis del factor neurotrófico del cerebro (BDNF).  Dosis bajas de ketamina (un bloqueador de los receptores NMDA en el cerebro) aumenta los niveles de BDNF, asociado a efectos antidepresivos. También menciona que el estudio demuestra la relación entre el efecto de la ketamina en los receptores NMDA y el aumento de los niveles de BDNF que supone cambios en la forma en que las células nerviosas se comunican y que antes no se había asociado a ningún tipo de medicamentos.

 En suma, estas evidencias son una valiosa herramienta de investigación para identificar biomarcadores de respuesta a fin de desarrollar la próxima generación de antidepresivos de acción rápida en los trastornos depresivos graves y con riesgo autolesivo.

 

Referencias.

1. Club drugs: los viejos fármacos son las nuevas drogas de la fiesta. Abanes S., Peiro AM., Farre M. Barcelona : Med Clin, 2004 Sep, Vols. 123(8):305-11.

2. Antidepressant effects of ketamine in depressed patients. Berman RM, Cappiello A, Anand A, Oren DA, Heninger GR, Charney DS, Krystal JH. s.l. : Biol Psychiatry. 2000 Feb 15;47(4):351-4.

3. Ketamine and the next generation of antidepressants with a rapid onset of action. Machado-Vieira R, Salvadore G, Diazgranados N, Zarate CA Jr. s.l. : Pharmacol Ther. 2009 Aug;123(2):143-50.

4. Serum brain-derived neurotrophic factor, depression, and antidepressant medications: meta-analyses and implications. Sen S, Duman R, Sanacora G. s.l. : Biol Psychiatry. 2008;64:527–532.

5. Effects of Intravenous Ketamine on Explicit and Implicit Measures of Suicidality in Treatment-Resistant Depression. Rebecca B. Price, . Matthew K. Nock,. Dennis S. Charney,. and Sanjay J. Mathew. s.l. : Biol Psychiatry, 2009, Vols. September 1; 66(5): 522-526.